Me llamo A.D,
Voy y vengo todos los días a un pueblo que está a 150 kilómetros de la ciudad donde está mi hogar.
Han operado a mi marido de la espalda, de las cervicales, y tiene que estar dos meses en reposo absoluto, pero yo tengo que ir a trabajar a 150 kilómetros, y no tenemos familia que pueda atenderlo.
He preguntado por que me den movilidad por salud laboral, pero me van a poner mil reparos. Por lo que tendré que gastar todas mis vacaciones, asuntas particulares, etc para poder atenderlo. Me siento impotente y sin salida, y la única solución que me dan "mis compañeros" de la Dirección General de Función Pública es que pida licencias sin retribución. ¿Puede una familia de hoy en día, con hipoteca y todos los gastos habituales, vivir renunciando al sueldo?
veo antes el acercamiento de los presos etarras que el propio nuestro.
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